Son de Miel


La mayoría de las plantas con flores (angioespermas) dependen de animales que visitan flores para su reproducción sexual. Insectos y otros animales son atraídos a las flores por la recompensa de comida (néctar, polen y aceites). Durante su visita a las flores ayudan a la transferencia de los granos de polen desde las anteras hasta el estigma de la misma u otra flor, a este proceso lo nombramos polinización.

 

La polinización animal (zoopolinización) es crítica para los cultivos y los ecosistemas naturales y desempeña un papel central en la ecología y evolución de las plantas. Durante los últimos 100 millones de años las angioespermas se han diversificado para convertirse en las plantas dominantes de todos los ecosistemas terrestres. Entre los polinizadores animales encontramos insectos, aves y murciélagos.

 

Las abejas son el grupo más importante de polinizadores. A diferencia de las avispas, las abejas alimentan de polen a la cría y por ello cuentan con estructuras especializadas (escopa o corbícula) y con pelos ramificados que son importantes en la adquisición y acarreo de polen y algunas abejas tienen estructuras especializadas para adquirir polen de flores específicas.

 

El manejo de colmenas de abejas puede suponer beneficios ambientales y agrícolas por los servicios de polinización que realizan, sin embargo se debe considerar que la polinización no sólo depende de la abundancia, sino de la diversidad de polinizadores. Es decir,  cuando hablamos de “salvar a las abejas” deberíamos pensar no sólo en Apis mellifera, sino en todas las especies de abejas y ¡todos los polinizadores!

 

 

 

REFERENCIAS

MALLINGER, R. y GRATTON, C. (2015) Species richness of wild bees, but not the use of managed honeybees, increases fruit set of a pollinator-dependent crop. Journal of Applied Ecology 52, 323–330.

WASER, N. (2001) Pollination by Animals. Encyclopedia of life sciences.